martes, 16 de noviembre de 2010

Helado

Nadie dijo que la vida fuera fácil. Demasiadas frustraciones.
¿Será que le gusto? Me miró más de tres segundos.
No, es que tienes una chispa de chocolate en la cara.
Nunca sabes hasta que sabes y nunca sabes cuándo sabrás. Tengo un problema con esta frase pues aleja todo de la determinación personal y lo deja todo a la casualidad.
¿Qué haces cuando un chico se te acerca y te dice que estás bonita?
Depende de mi humor, la temperatura, la humedad, la capacitancia del ambiente, oye, ¿estás tomando nota?
El control de variables nunca se me dio. Empiezo a pensar que era una mentira lo que me dijo aquella tarde.
Todo empezó un día que aburrido de ver la pared de mi cuarto me decidí a olvidar la depresión, los miedos, el stress y mis zapatos.
Caminé a un parque cercano y me senté en el suelo esperando que alguna chica voluptuosa se me acercara. Tristemente sólo se me acerco un gato. Tal vez mis ojos la conocieron ese día pero mi corazón y mi cámara telescópica la conocían ya desde hace un tiempo.
Mientras ella estaba sentada y molesta porque un pájaro decidió que ella era un lugar ideal para soltar el miedo, yo comía un helado de coco súper dulce así que pensé “¿por qué no mejor se lo regalo?”
Hola, me pareces una chica de las que les gusta el helado de coco le dije casi temblando.
¿Ah sí? ¿Te parece? me contestó todavía malhumorada.
Bueno… no te lo tienes que comer contesté apenado.
Acompáñame a comprar lápices.
Nunca le pregunté a quien esperaba, ella estaba muy metida en sus cosas, me llamaba, pero cuando estaba con ella no parecía que le importara que estuviera ahí ni que me necesitara.
Mira si no me haces caso un día no volveré a cargarte las bolsas blofeaba pero muy convincentemente.
¿Ah sí?, ven acá, te daré un premioodiaba cuando usaba una de mis debilidades más grandes para dominarme.
La vida es como un helado napolitano, siempre tiene menos de lo que te gusta y siempre en el fondo. Pensé muchas veces en dejarla pero nunca fui lo suficientemente valiente.


lunes, 8 de noviembre de 2010

Mi primer contacto con la política por Memo


        Este relato no pretende más que mantener en mi memoria los acontecimientos del día 12 de mayo de 2007 que ha sido uno de los mejores días de mi vida.
         Todo empezó unas semanas antes del día mencionado, ante el gran acontecimiento que sería el la proyección de la película spiderman 3, yo y mi gran amigo Yorch acordamos ir a ver la película una semana después del lanzamiento debido a que odiamos el aglutinamiento de gente. Ese día acordamos que yo avisaría al Abuelo y  Patrick, mientras que él le avisaría al buen Leches.
         Todo parecía ser perfecto hasta que unos días después me mando un mensaje Leches preguntando por la fecha y el lugar de encuentro, yo le propuse 12 de mayo a las once en frente de la catedral, él dijo once y media y todo estuvo bien hasta que él propuso invitar a Néstor yo dije que si iba ese personaje no iría el buen Yorch, Leches insistió en llevarlo y ahí terminó la conversación.
         En fin le comuniqué al Abuelo lo acordado y posteriormente hice lo mismo con Patrick (que en realidad no se llama Patrick, sino Juan, la razón del apodo es que su antiguo sobrenombre era Patricio en relación al personaje de  Bobo esponja), ya todos enterados del edicto sólo faltaba esperar pacientemente al tan añorado día donde se unirían varias potencias por un fin común. Sacrificios tuvieron que hacerse, por lo menos de mi parte rechacé ir al cine con los compañeros de la prepa, pero todo fue por un bien mucho mayor que sería estar con mis mejores amigos (pocas veces frecuentados).
        Llegado el día me desperté a las ocho de la mañana, más bien fui brutalmente despertado por el Abuelo que hablaba para confirmar la cita.
        Todavía soñoliento me puse a ver basura en la televisión y jugar un rato pokémon, dadas las 10:50 me bañe y salí de mi casa para tomar el camión que me dejaría en el centro, a escasos pasos del paradero pasaron dos camiones que no pude tomar (situación bastante repetida en mi vida), bueno eso es irrelevante, tomé el camión ulteriormente.
        Pase 45 minutos de mí vida en ese feo camión, la demora era ocasionada por la ineptitud de los programadores de los semáforos multiplicada por la estupidez de los policías que se ponen a dirigir el tránsito.
       Llegué a la cita 25 minutos después de lo acordado, en camino al encuentro de mis amigos me crucé con mi novia que después de saludada partió a su clase con suma velocidad. Al llegar vi a Leches, al Abuelo, a Yorch, aun tipo extraño llamado Lalo que como una espina de monte venía pegado a Leches al igual que Néstor.
        Al ver la ausencia de  Patrick hablamos a su celular que contesto alguien extraño, cuya verdadera identidad sólo conoce Yorch,  esa persona nos indicó que Patrick se encontraba en casa de su abuelita. Acto seguido nos dirigimos a tomar el camión siendo las doce, la película empezaría a la 1:20, decidimos ir caminando.
       Yo, el Abuelo y Yorch caminábamos por un lado, y Néstor, Lalo y Leches por otro. Después de pintarle bigotes y un diente negro a Ivonne Ortega y tomarle un foto al Abuelo poniéndole un dedo en la nariz a Xavier Abreu nos dimos cuenta que no llegaríamos a tiempo jamás debido al sol.
       Al llegar a un lugar plagado por panistas regala camisas, intentamos obtener una, lo que nos fue negado de una manera muy indirecta. Compramos refrescos sobrevaluados,  corrimos como imbéciles por las calles transitadas, repartimos la propaganda del plan que nos regalaron, grabé ese suceso, y Leches y compañía nos rebasaron.
        Nos dimos cuenta de lo poco probable de llegar a tiempo así que tomamos un camión esperando alcanzar a Leches pero como si hubieran sido tragados por algún extraño fenómeno de la dimensión desconocida, desapareció.
        Llegamos a la 1:10 a la taquilla, compramos los boletos y emprendimos un largo viaje hacia comercial mexicana, comprar provisiones para meter de contrabando al cine sería nuestro objetivo.
        Arribamos a la sala del cine de la gran plaza 1:25, disfrutamos de una hermosa película, echando de menos la ausencia de Leches nos resignamos. Al salir del cine  fue necesario ir al baño, Yorch había roto su cierre así que había costurado su cremallera, gran problema, tuvo que romper las costuras de su pantalón para poder realizar sus necesidades fisiológicas, resultante de eso fueron varios minutos de risa.
         Al intentar tomar fotos de mis amigos me di cuenta que mi cámara recién adquirida tenía dañado el display, lo que no impedía la adquisición de fotos.
         Salimos de la gran plaza y decidimos regresar al centro a pie, en el camino tomamos un video de Yorch apareciendo de la nada y saludando al Abuelo y una foto de un estúpido pidiendo ayuda a un oficial de policía por la descompostura  de su carro.
         Llegando a homemart fuimos saludados por una niña desconocida que pasaba en un coche, en el mismo lugar fue solicitada nuestra presencia en un mostrador de nuevos refrescos que era atendido por dos feas, un gordo, y una muchacha de aurea cabellera, que aguantaba por cierto. Se nos instó a tomar todo lo que quisiéramos de ese refresco debido a la poca demanda a la que estaba sujeto el mostrador, cosa que hicimos, despidiéndonos de la rubia seguimos nuestro largo camino.
        Le tome una foto a una camioneta bonita, platicamos de viejos tiempos y tomamos algunas fotos de tipos partidarios del PRI poniendo encima de la propaganda de Xavier Abreu la suya.
         Al tomar algunas fotos un tipo en una camioneta negra que podría ser una Dodge, o una Ford, no recuerdo bien (diremos que era un Lobo), nos animó a seguir tomando fotos mientras el accionaba su claxon. Yorch tomó algunas fotos, y al verlos cruzar en su camioneta saludamos a los partidarios de Ivonne que molestos se iban.
         Cual fue nuestra sorpresa al darnos cuenta de que no se fueron sino que tomaron otro camino para podernos alcanzar, una vez ya percibidos por nosotros yo propuse tomar otro camino para evadirlos, cosa que fue imposible ya que estábamos en una avenida muy transitada.
        Asumimos con valor nuestro destino y fuimos hacia su encuentro, el más fuerte dijo:
-       ¿Por qué están tomando fotos quien los mando?
-       Nadie  sólo le estamos tomando fotos a todo- respondí
-       No se hagan pendejos, ¿por qué nos estaban tomando fotos- dijo el más fuerte –¿Ya le hablaste a ese cabrón?- le dijo al gordo.
-       Sí, ya está viniendo- dijo el gordo
-       Nosotros estamos haciendo nuestro trabajo, así como ustedes, déjennos hacer nuestro trabajo ¿por qué nos estaban tomando fotos?, ¿quién les paga?- dijo más o menos el gordo.
-       Que bien que nos pagaran- dijo Yorch riendo.
-       Nosotros no somos de ningún partido, ni nos pagan- dije yo
-       A ver y ¿qué hacen por acá?- dijo el tercero.
-       Venimos al cine- dijo el Abuelo.
-       ¿Por donde viven?- dijo el tercero
-       Ah sí, le vamos a decir donde vivimos- dijo riendo el Abuelo
-       Nada más dígannos la colonia, sólo la colonia queremos saber- dijo el gordo.
-       Yo vivo por Pacabtún- mentí
-       Eso está muy lejos, ¿qué hacen por aquí?- dijo el gordo
-       Vinimos al cine- dijimos los tres riendo
-       Y ¿por qué estaban tomando fotos?- dijo el más fuerte
-       Yo estaba probando mi cámara porque ya no funciona, mire- se la mostré al más fuerte que intento quitármela pero no se lo permití.
-       Puede ser que tu display no funcione, pero tu memoria sí- dijo el más fuerte, en eso Yorch sin que se diera cuenta le quito la memoria a su cámara y les mostró las fotos que tenía que no eran las que acabamos de tomar.
-       Bueno si no estaban haciendo nada malo ¿qué les preocupa?- dije yo
-       Nada pero esperen a que llegue el del IPEPAC  platican con él y se van- dijo el gordo.
-       No tenemos tiempo- dije
-       Yo tengo que estar en mi casa a las 6- dijo Yorch
        Empezamos a caminar y nos empezaron a seguir, yo le quite la memoria a mi cámara sin que se dieran cuenta y la guardé. En el primer momento que pudimos cruzar la calle y tomar un camión lo hicimos, al subir un señor me empezó a hablar en maya, a lo que extrañado le dije que no hablaba maya.
         Llegamos al centro tomamos otro camión llegué   a donde tenía que bajarme me despedí de mis amigos extrañando que Leches no nos hubiera acompañado, y habiendo tenido uno de los mejores días de mi vida regresé feliz a mi casa a las 5 de la tarde.

Agradecimientos:
A mis grandes amigos Yorch y al Abuelo por haberme acompañado en esta hermosa experiencia

¿Piensas en mí?

¿Piensas en mí? ¿Recuerdas nuestros días bajo el sol?  ¿Sientes un hoyo en el corazón?  Al ver hacia adelante ¿encuentras el principi...